El Crepúsculo de Mollendo
Muchos amigos arequipeños y puneños suelen contar los meses y días para empacar maletas e irse de vacaciones al puerto bravo de Mollendo., ciudad que está a tres horas en bus de la ciudad Blanca de Arequipa.
Y nos fuimos a Mollendo, estando en Arequipa, abordo del bus de la empresa Santa Úrsula. Al llegar a la ciudad, uno cree que viene a un lugar descampado, feo y solitario. Sin embargo, al alejarnos del terminal a bordo de un colectivo «bajamos» al puerto y la vista panorámica va mejorando, las casitas de madera ( al igual que Chucuito y La Punta del Callao) y en especial el muelle artesanal y de Turistas son la atracción del pueblo.
Se ilumina la vista panorámica y «olemos» a mar ( nunca me deja esa aroma marítima de mi niñez), sentimos la brisa que nos acoge de buena gana, listo para recorrer sus plazitas, muelles y playas Nro 1 y 2.
Lindo atardecer
Pero lo mejor de Mollendo, para aquellos que les gusta sentarse sin zapatos sobre la arena de la playa, mirando a lontanaza el azulino mar, es el crepúscuclo( atardecer) cuando el sol desciende y se esconde en ese lejano mar, es maravillosamente alucinante.
Como día el novelista David Foster, al explicar un crepúsculo: es una explosión , que irradia cuchillos de luz. Y en Mollendo sucede eso, pues al atardecere uno se maravilla al ver esa luz que cae, esa luz que se hincha perfectamente redondo e inmenso -sigo con David Foster- y nos ciega por momentos y más aún cuando uno está motivado -¿será?- con cerveza o vino ( al lado de buenos amigos ), disfrutamos de la naturaleza. También el alba( el amanecer) es otrpo cantar, otro disfrute (Revista Full Ritmo nro 3 )
