EL PUERTO INGLES ESTA EN ILO, EL SUEÑO LUDICO DE MI NIÑEZ

DE niño no dejaba de soñar con una playa con tobogán, misma piscina, cuyas aguas provenían de un inmenso mar.

Toda la vida este sueño me siguiò en mis noches de niño asustado con las pesadillas, aunque al soñar con esta playa me extasiaba, me reía solo, y nunca pude sentir esa exaltaciòn que significó este sueño que años màs tarde se hizo realidad al conocer el puerto inglés, una maravillosa bahìa que está ubicada en la ciudad de Ilo ( provincia del departamento de Moquegua) y gracias a un amigo que me llevó a este puerto que hace 500 años atràs, dicen, desembarcó el pirata inglés Sir Fransis Drake.

Increíble, mi sueño que me persiguió por muchos años acababa de soñarlo, en pleno día, muy despierto. Esas imágenes que veía en mis sueños las encontré en este precioso lugar del Perú. Llegar a Ilo fue doblemente maravilloso, pues sus comidas y la bahía convertida en una piscina natural con tobogán, escarelita para bajar la playa y un balcón para los enamorados que quieran contemplar el crepúsculo chocando con la plataforma marítima,hicieron de este viaje un encuentro lúdico con mi sueño de la niñez lejana del barrio Tarata, en el callejón de La Perla, Callao.

Ilo es una ciudad porteña. Pues al salir del hotel caminè tres calles abajo y al toque pude divisar el mar que albergaba barcos y lanchas de los amigos pescadores de la ciudad. Preguntaba a dónde podría comer un delicioso pescado frito y todos me señalaban que a una cuadra más abajo ( El varadero) encontraría una variedad de pescados frescos y sabrosos.

No se equivocaron y los que preparaban los pescados eran cocineros informales, apostados cerca al muelle de Ilo y que te cocinaban cualquier plato a base del pescado que uno quería.

Probé un sabroso y crocante lenguado frito y con ensalada y arroz. Le pedí al cocinero que me buscara un cafecito para completar mi dicha culinaria. Me sentìa como si estuviera en mi barrio. Alucinaba estar en el barrio comiendo en la esquina donde vendía pescado frito la señora Vilma. Jamàs voy a olvidar a la señora Vilma, quien fuera todo un personaje en mi niñez y que, en muchos casos, ayudaba a la gente que no tenía un plato de comida por las noches.

La señora Vilma auxiliaba a cualquier vecino con hambruna con un platito de pescado frito. Ella era la madrina de cientos de chiquillos que probaron de su sazón a la hora nocturna del barrio. Por eso digo,que en Ilo encontrè la buena sazón en el pescado y la maravillosa vista del puerto inglés,que queda a 15 minutos en auto de esta ciudad porteña. Nunca me voy a olvidar de este puerto Inglés,que al igual que Camanà y Mollendo, se puede disfrutar de sus platos tradicionales y de playas para veranear lejos de la capital limeña. Volveré pero con moni, pepa y salva, lo prometo.