Doña Josefa viste a Mamita Chapi
De tanto coser los vestidos de los santos, doña Josefa Aguirre suele soñar seguido con Jesús y la mamita Chapi. Ella desde hace más de 20 años le pone el color a la fe de miles de devotos de La Joya, La Unión, Pedregal, Mollendo, Puno, Matarani, incluso del mismo Lima y Salta de Argentina que le llevan sus santitos y vírgenes a su taller para que los «vista» con elegantes y coloridas túnicas y mantas bordadas con hilos de oro.
Pese no haber estudiado alta costura, Doña Josefa, nacida en Yanahura, Arequipa, corta perfectamente. Tiene buen pulso.
Los hilos dorados, plateados y de tantos colores refulgen en su taller y ella misma dice que para vestir a la Mamita Chapi usa diversos colores, pero que armonicen con su alta vestidura. «A la mamita le he hecho muchos mantos, tambien a las Virgenes de Cayma, Candelaria y ahora estoy bordando el vestido de la Virgen de Fátima, que es un pedido de la mina Yanaquihua(ubicada por Ocoña).
¿Cómo así aprendió vestir santos?
En mi casa, en Selva Alegre, ya cosía y como te dije el cura me pidio ese favor, después vinieron más sacerdotes y gente de comunidades muy alejadas que tienen sus santitos de bate de yeso, pasta y de resina. Yo los visto y trato de armonizar los colores con sus rostros. Incluso han venido de Yauyos(LIma) y Salta (Argentina) para que los vista a sus santos patrones.
Casi todos los días, yo hablo con Jesus y con mi Mamita Chapi, mi patrona que suelo ir todos los 1 de mayo a su Santuario. Muchos peregrinos caminan todo un dìa para subir al santuario.
¿Por último, usted que sabe de santitos y vírgenes, pero conoce algún santo humano, de carne y hueso?
No, nunca he conocido a un santo real, que pena, no…