UNA LINDA TORTA DE SEIS PISOS PARA LA YARA
Una torta linda, una torta blanca de seis pisos, o crema, seguro que era crema -que dice caballero- pero vimos una grandiosa torta que la mandó a preparar Alberto Vargas en la mejor panadería de Ayacucho. Yarita Lizeth Yanarico- mejor le decimos Yara, porque eso de escribir todo el nombre y apellido paterno cansa, que flojo soy, jajaja,pero me enteré que a torta la mandó a preparar, repito, en una panadería que todo es caro, y por tanto, la torta le costó su sencillazo al amigo Vargas.
Averiguando,porque él no me quería decir, me contó un ayudante de El caballero, que la deliciosa y apetecible torta le costó la suma de 750 soles. Asu, el bolo de cualquier obrero. Pero si hay la posibilidad y el gesto de darle un bonito regalo a la más taquillera del folclor, no hay problema.
Yara al subir vio la torta adornada de rosas rojas y blancas, la vi que casi se le sale las lágrimas. Seguro que recordó su infancia, rodeada de su familia, pobre, sin luz, en pena lluvia -claro en noviembre llueve duro en la sierra de Puno- y ahora lejos de su tierra, pero aclamada por miles de fans. Estoy seguro que la Yara en el fondo de su ser, hubiera querido tenerla a su mamita, a su hermanita en estos momentos, en este instante que apgará la velita por su cumpleaños.
¿Cual habrá sido su deseo secreto antes de soplar la torta?
Siempre cuando Mónica me pide que pida un deseo y luego apague la velita, sólo pienso que mis hijos estén bien de salud y que les vaya bien en la vida. ¿Y cual habrá sido el deseo de Yarita?. pero la vimos, repito, feliz, alegre y la torta estaba ahí, grandiosa.
Luego nos enteramos que la yara estaba repartiendo tortitas a toda la gente que la saludaba, en el camino hacia Huánuco, ya eran las 9 de la mañana que la vimos -de lejos- el bus que la llevaba a su próximo destino. De verdad me quedé con las ganas de perdirle un pedazito de torta.